La tarde del pasado domingo 2 de junio, en la fiesta del Corpus Christi, la Hermandad de la Soledad volvía a escribir con letras de oro una nueva hoja en su historia. Tras su estancia en la Iglesia Parroquial de Ntra. Sra. de la Asunción para estar presente en el Solemne Triduo a Jesús Sacramentado y su participación en el procesión del Corpus Christi, la Santísima Virgen regresó a su Santuario pasadas las 19:30 h. acompañada por numerosos fieles y devotos. La Banda de Música "La Soledad" de Cantillana acompañaba en este emotivo traslado de la Virgen de la Soledad, que visitó la Casa Hermandad de la Divina Pastora y de Ntra. Sra. de la Asunción, la Iglesia de la Misericordia y algunas calles por las que no es habitual que la Virgen transite con normalidad. Especialmente emotivas fueron las calles de El Chito, Castelar, Juan Carlos I y su avenida, en la no cesaban las petaladas y los fuegos artificiales en honor a su Patrona Coronada, haciendo entrada en su santuario a medianoche.
La Santísima Virgen lucía de gloria en su paso sin palio y sobre la peana de su camarín, cera rizada, manto de Ojeda y la saya del patronazgo, siendo escoltada por los candelabros de guardabrisas cedidos por la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno y numerosos estrenos, regalos realizados por hermandades y particulares con ocasión del magno acontecimiento que vivió nuestro pueblo el pasado sábado 25 de mayo.
Si en la mañana del Corpus la Virgen enamoraba a su paso, este traslado de regreso a su Santuario se tornó muy emotivo por la satisfacción de estos días en los que Cantillana ha celebrado muy intensamente la Coronación Canónica de su celestial y amantísima Patrona.
Fotografías: J. Ángel Espinosa
