El pasado domingo 20 de noviembre, en la Solemnidad de Nuestro Señor Jesucristo, Rey del Universo, tuvo lugar el Solemne Besamanos a Nuestro Padre Jesús Nazareno. El Señor de los Pescadores fue presentado sobre peana marmórea escoltado por sus cuatros característicos ángeles mancebos pasionistas que cada Madrugá del Viernes Santo acompañan al Nazareno en su paso procesional.
A los pies de su capilla, el Señor vestía la túnica roja otomana que estrenara en 2018, completando su iconografía los atributos de la realeza de Cristo: corona de espinas dorada y potencias en plata dorada. Sobre el pecho destacaba el sacratísimo corazón de Jesús, distintas joyas en la túnica (entre ellas, la medalla de oro de la villa) y, a los pies, rosas rojas. Además, la priostía dispuso una imagen del Niño Jesús en una custodia alumbrada por candelería. La Capilla se encontraba engalanada con ricos damascos, lámparas y el estandarte corporativo, rematándose el conjunto con unas caídas bordadas pertenecientes a uno de sus doseles de culto.