07/07/2025

LA HERMANDAD DE NUESTRO PADRE JESÚS CONMEMORA EL 170º ANIVERSARIO DE SU PROTECCIÓN EN LA EPIDEMIA DE CÓLERA

En este 2025 la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno viene conmemorando el CLXX aniversario de las procesiones y función de acción de gracias a su titular en el contexto de la epidemia de cólera de 1855 que azotó la Península Ibérica. A través de las redes sociales de la hermandad se han ido dando a conocer a hermanos y devotos diversas publicaciones que profundizan en este hecho clave en su historia. Para dicho fin, la hermandad publicó un cartel que ilustra una fotografía de finales del siglo diecinueve (la más antigua del Señor que se conserva fechada en 1880 aproximadamente, de Eulogio Cota).

La corporación ha tenido presente esta efeméride en celebraciones como la Función Principal de Instituto (retrasmitida por Canal Sur TV) o en la declaración institucional con la que el Ayuntamiento del Cantillana refrendó la devoción popular de la sagrada imagen del Señor de los Pescadores y que se materializó el pasado Viernes Santo con la visita efectuada al consistorio.

Durante el siglo XIX hubo diversos brotes de la epidemia de cólera en España, cuyos primeros brotes epidemiológicos se produjeron en el primer tercio del siglo debido en gran parte a las condiciones sociales siendo especialmente con mayor virulencia a mitad del siglo. Ya a finales de la centuria pudo ser tratado por la medicina disminuyendo considerablemente las muertes por esta causa. El cólera morbo es una enfermedad infecto-contagiosa intestinal provocada por la bacteria Vibrio cholerae que produce una diarrea secretoria.

Desde el primer brote en 1817 hasta finales de esa centuria, en total fallecieron unas 800.000 personas por esta causa en toda España. Estas epidemias provocaron una recesión económica, así como una oportunidad de cambio profundo en la sanidad e higiene en nuestro país. Cabe mencionar que el terror causado en la población, debido a las muertes ocasionadas, fue motivo de revueltas populares e inestabilidad social.  

En 1853 la enfermedad regresó y desde Vigo se extendió paulatinamente por el norte de España. Los brotes continuaron por otras zonas del país en los años siguientes, siendo la epidemia de 1855 la más documentada por la prensa de la época. En aquella ocasión afectó a amplias zonas del interior viéndose afectados uno de cada diecinueve españoles (con mayor virulencia especialmente en las clases bajas), generando gran miedo. En las publicaciones de la hermandad se hace referencia a que se tiene constancia de que hubo afectados y muertes en nuestro pueblo: "Ante esta situación desbastadora, los fieles volvieron sus ojos a Dios implorando su misericordia y se comenzaron a realizar rogativas con imágenes veneradas, algo muy usual en estas circunstancias y de las que ya en Cantillana hay antecedentes al menos desde 1602"

Ante esta situación de calamidad, en el bienio 1854-1855 se organizaron rogativas ante las imágenes más veneradas en ciudades y localidades de toda la nación, como en Sevilla con la Virgen de los Reyes, la Virgen de las Angustias de Granada, la Virgen de los Remedios de Ubrique, la Virgen del Valle de la Palma del Condado, entre otras. En esta situación, no fue menos Cantillana, que ya en otras ocasiones había acudido a implorar la protección divina en este tipo de calamidades, y en esta ocasión sería Nuestro Padre Jesús Nazareno quien protagonizaría este tipo de rogativas

Aunque no consta documentación al respecto, "debieron de producirse unas rogativas, de hecho, si hay testimonios orales que afirman que en otras ocasiones el Señor ha salido en rogativas y así queda recogido en las reglas de la propia Hermandad, que regula las salidas extraordinarias para este fin “según es costumbre”. El pueblo debió de recurrir en esta ocasión a Nuestro Padre Jesús, por eso es con esta imagen con la que se celebra unas procesiones y función en acción de gracias". 

Las publicaciones subrayan como dato más importante la evidencia de Nuestro Padre Jesús como una "devoción colectiva que aglutina a toda la sociedad cantillanera y delata un importante papel dentro del devocionario particular del pueblo". Todas estos estos datos pueden ampliarse más detalladamente con su lectura en los distintos artículos publicados en las redes sociales de la hermandad.